Evolución
Moléculas orgánicas de nubes cósmicas,
Millones de años en medio de la eternidad.
Surgimos de lo primordial;
Nuestra espiritualidad vino con la evolución.
Hay evidencia contundente de que los seres humanos evolucionaron desde moléculas básicas primitivas. Aquellas moléculas fueron formadas de los gases y de los procesos de nacimiento de las estrellas y los planetas. Aquellas estrellas y planetas fueron a su vez formados por el primer movimiento del universo. Ese primer momento del universo vino de la nada. Así que estamos en la cima de una cierta ola de evolución.
Reduciéndonos a la situación humana desde la cósmica, nuestras mentes representan la máxima expresión de quienes somos. Aún más, la espiritualidad es la máxima expresión de la mente. Uno podría decir, por lo tanto, que la espiritualidad no es una creencia, una construcción mental o una opinión. Más bien puede considerarse una función o una consecuencia de la evolución.
Si la espiritualidad es simplemente una función de la vida, el borde de una corriente cósmica, entonces ¿a dónde se dirige? No lo sabemos. Como el universo, sigue expandiéndose hacia un territorio desconocido. Podemos decidir cooperar y seguir esa ola, o podemos ignorar nuestra espiritualidad y así ignorar uno de los significados básicos de ser humano. Si elegimos participar en el proceso completo de ser humanos, entonces verdaderamente cumpliremos con nuestra parte en la evolución del universo.