Este es uno de los temas que más interés genera entre los terapeutas y los clientes o pacientes que reciben Reiki, como también de los practicantes que se dan el Autoreiki.
Es importante reconocer que no existen dos personas iguales, por lo tanto tenemos que partir de la idea fundamental de que cada tratamiento es individual y la energía al hacer su propia función, provoca una gran diversidad de sensaciones y reacciones tanto en quien la recibe como en quien la ofrece.
A continuación describiré las sensaciones que manifiesta la persona que recibe tanto en el auto tratamiento como en el que se recibe de otra. Esta explicación se da con el propósito de facilitar la labor terapéutica, así como el borrar definitivamente el miedo que provoca la desinformación.
Es importante tomar conciencia de todo aquello que sentimos o sucede, es importante, ya que es algo de la persona y por ello nos significa. No existen efectos buenos o malos, todas ellos son simplemente reacciones a la acción energética y tenemos que dejar que fluyan. En ningún momento son dañinos o perjudiciales.
Todas estas molestias pueden durar aproximadamente 72 horas, en las cuales es conveniente descansar, tomar líquidos, cubrirse del frío y dormir.
Entre los más frecuentes y comunes en las personas que reciben Reiki, están los siguientes:
Cambio en la temperatura interior del cuerpo: Es muy frecuente la sensación de frío por todo el cuerpo, especialmente en el interior y en los pies. Algunas veces tiene una duración hasta de 12 horas. Significa que hay movimiento de energía y principalmente bloqueos que están ya en movimiento. Muy pocas veces se presenta el fenómeno contrario, el de la totalidad de calor. Este principalmente se siente en algunos puntos del tratamiento, y se le considera momentáneo.
Sensación de febrícula o pequeña calentura: Esta es frecuente en personas que tienen su sistema energético sensible a la entrada de la energía Reiki. Se da principalmente en las iniciaciones de los tres niveles. Tiene duración aproximada de 12 y 24 horas, llegando la temperatura corporal a un máximo de 37.2 grados.
Cambios en el ritmo de la respiración: Es muy frecuente este estado, especialmente en el momento de dar Reiki al tórax. Se relaciona directamente con las emociones internas de la persona. Generalmente al inicio de la sesión se acelera para luego ajustarse en un estado de armonía y equilibrio corporal.
Cuerpo muy tenso: Sensación poco frecuente, aunque de utilidad para monitoriar en forma potencializada, las áreas de mayor estrés.
Exceso de peso: Sensación muy frecuente en la terapia Reiki. Indica que los cuerpos sutiles se encuentran en otra posición a la habitual.
Cansancio muscular: Muy poco frecuente. Cuando se presenta, generalmente desaparece al término de la sesión.
Escalofríos o fluir de la energía por el interior del cuerpo: Muy común durante casi todas las sesiones de Reiki. Puede permanecer esta sensación durante algunas horas.
Ligeros dolores y/o piquetes en algunas partes del cuerpo: Sumamente frecuente, especialmente en las primeras sesiones de Reiki. Estos se deben a pequeñas contracturas existentes en el cuerpo, las cuales son tocadas o removidas por la energía.
Sensación de vacío en los chakras mayores: También es frecuente este tipo de sensación en las primeras sesiones de Reiki. Se debe a que los chakras presentan estados de bloqueo o insuficiente energía.
Temblores involuntarios: Estos son frecuentes debido al movimiento de la energía y al efecto de desbloqueo que se presenta. Puede ser en todo el cuerpo o en piernas, brazos y manos. Significan que la persona tiene fuertes bloqueos internos y requiere que se programen varias sesiones de Reiki hasta que desaparezcan.
Suspiros: Su presencia es común, normal y deseable. Están directamente relacionados con la sanación de emociones y sentimientos. Generalmente aparecen al dar Reiki al chakra timo – corazón.
Jadeos o necesidad de jalar aire a los pulmones: Son frecuentes en los tratamientos a personas que controlan mucho sus emociones. Aparecen únicamente durante el tratamiento en el chakra timo - corazón o al sanar acontecimientos dolorosos a través de la técnica de memoria celular. Lo ideal es detener el tratamiento en las formas anteriores, colocando al paciente del lado derecho hasta que se controle dicho estado.
Deseo de hablar algunos aspectos de nuestra vida personal: Es muy frecuente que esto suceda. Se debe principalmente a la necesidad de desahogar hechos o emociones. Lo mejor es darnos la oportunidad de sacar aquello que nos molesta o nos tiene en estado de tensión. El terapeuta podrá escuchar pacientemente sin intervenir o controlar la expresión libre. Si tiene la habilidad de confrontar o apoyar con su participación, integrará a la sesión de Reiki, la ventaja de una actividad psioterapéutica.
Sensación de flotación o de desprendimiento: Generalmente se presenta en personas muy sensibles al manejo de energía y se debe al movimiento o reorientación de los cuerpos sutiles. Este tipo de personas pronto se habitúan a estas nuevas experiencias, aprendiendo a disfrutarlas.
Desarrollo momentáneo de la sensibilidad: Pocas veces se presenta esta experiencia, la cual se cataloga como un verdadero regalo de la energía. Se describe como una increíble potencialización de los sentidos. Hay quien la compara con la sensación llamada " integración universal "
Estados alterados de emotividad: Este fenómeno mental es variable, según el estado emocional de la persona. Se caracteriza por la facilidad de pasar de unos a otros repentinamente. Lo ideal es dejar que fluyan hasta desaparecer, siempre dentro de la misma sesión de Reiki. Se presenta al trabajar las posiciones de la cabeza, en el chakra timo – corazón, o al trabajar la técnica de memoria celular.
Estimulación Sexual: Frecuentemente se presenta con distintas intensidades al trabajar las posiciones de la cabeza o en bajo vientre, especialmente en el chakra de la sexualidad.
Obedecen principalmente a la liberación de la sexualidad reprimida, a emociones y deseos no canalizados constructivamente o simplemente a la fuerza interna de esta actividad humana. Lo ideal es dejar que fluya sin que cause angustia o ansiedad, tanto en el paciente como en el terapeuta.
Estado de hiper - energetización: Sensación de excesiva energía. Son poco frecuentes en los tratamientos Reiki, aunque sí en las iniciaciones. En estos casos lo ideal es saber que tiene una duración aproximada a las 12 horas, desapareciendo posteriormente.
Necesidad de pasar saliva o quitar algo que estorba en la garganta: Sensación poco frecuente relacionada a emociones atoradas principalmente por incomunicación, miedo, angustia o experiencias dolorosas. Lo ideal es detener el tratamiento normal y dar Reiki al cuello, hasta que desaparezca dicha sensación. Generalmente se presenta al trabajar posiciones de cabeza, cuello, timo – corazón, hígado, plexo solar, bajo vientre, riñones y cóccix.
Necesidad de orinar – Pérdida del control del esfínter de la vejiga: Podemos decir que estos dos estados son uno solo, dependiendo de la fuerza con que se presenten. El deseo de orinar es muy frecuente en casi todas las personas, especialmente al terminar una sesión de Reiki. La pérdida del control y la salida de un poco de orina es un caso más raro y poco frecuente, especialmente cuando el paciente está acostado de lado. En este último caso se sugiere que la persona satisfaga su necesidad fisiológica antes de iniciar la sesión. Finalmente, en caso de que sucediera, lo ideal es no dar importancia al acontecimiento.
Alteraciones en el funcionamiento digestivo: Son muy frecuentes y de muy variadas formas e intensidades las presentaciones de este estado. Todas son normales y no deben de preocuparnos. Van desde regurgitaciones, ruidos intestinales conocidos vulgarmente como " rechinidos del intestino ", flatulencias, deseo de comer o apetito voraz. Todas ellas significan que la energía esta trabajando correctamente.
Accesos de tos o abundancia de mucosidad nasal: Este estado es muy similar al anterior. Significa que la energía está haciendo su labor, desechando aquello que le estorba, en cualesquiera de los planos: físico, psicológico y mental. Cuando esto sucede es recomendable ayudarle al cuerpo tomando líquidos.
Sed - Deseo de tomar agua: Estado muy frecuente y normal. Medio por el cual el organismo solicita los líquidos que necesita para hacer su labor de depuración o limpieza física y energética. Lo ideal en esta circunstancia es tomar 8 vasos de agua al día. ( No refrescos o café)
Presencia de llanto involuntario – Acceso de llanto: Es un fenómeno muy frecuente en la terapia Reiki, especialmente al trabajar en el chakra timo – corazón. Varía desde un ligero lagrimeo involuntario hasta los prolongados accesos de llanto con profundo dolor. Esta situación generalmente desconcierta tanto al cliente como al terapeuta. Sin embargo, recordemos aquel pensamiento oriental que nos dice que solo a través de unos ojos lavados por lágrimas se puede encontrar el verdadero trasfondo o significado de la vida. Así pues, lo más recomendable es dejar a la persona contactar con sus sentimientos y permitir que aflore el llanto sanador del alma. En caso de que se pierda todo control de la situación, lo indicado será poner las manos en plexo solar (ombligo) para detener el fluir de las emociones.
Acceso de risa: Es una acción poco común. Sin embargo se presenta en alguno u otro paciente, especialmente en jóvenes. Ellos, para utilizar algún término de su comprensión lo describen como " me agarró el tonto." La realidad es mucho más compleja, debido a que es una descarga muy fuerte de las emociones que se encuentran reprimidas en la persona, siendo muy similar la situación del acceso de llanto.
Fuerte sudoración: Es muy raro el caso de que se presenten bochornos, sudoración fría, o a la temperatura normal del cuerpo. En algunas ocasiones aparece acompañado de un fuerte olor poco común. En cualquier caso significa que el cuerpo está depurando algunas sustancias que no considera adecuadas en su interior. Siempre desaparece durante la misma sesión de Reiki.
Cambios en la presión arterial: Una característica de esta técnica curativa es el equilibrio. Por ello, automáticamente promueve que la presión alta tienda a bajar y la baja a subir durante la sesión de Reiki. Posteriormente y después de varias, tiende a equilibrar en forma permanente a la presión de la sangre. Es muy conveniente saber cuáles son los parámetros en que podemos considerar normal nuestra presión arterial.
Visión borrosa: Es poco frecuente pero sucede que tiempo después de una sesión, la persona que recibió el tratamiento, descubra que le cuesta un poco afocar la visión, especialmente a corta distancia. Esto es normal y no debe causar alarma, ya que su duración es de algunos minutos. No más de una hora.
Visión muy brillante y en tonalidades vibrantes: Es una percepción común y agradable que se presenta algunas veces en la terapia Reiki. Es mucho más perceptible después de las iniciaciones. Puede durar hasta una hora u hora y media.
Liberación involuntaria de la energía corporal: Esta es una experiencia poco común, sin embargo debemos tomarla en cuenta ya que cuando se presenta puede causar angustia al paciente y al terapeuta por no saber como comportarse o encausarla. Las manifestaciones pueden ser a través de gritos, enojo, expresiones fuertes, o bien presentarse fuertes jadeos, movimientos corporales y descargas orgásmicas en el paciente. En estos casos, lo mejor es conservar la calma y dejar que fluyan las cosas por su propio cauce.
Sensación de estancia en el vientre materno o de renacer: Algunas veces se presenta esta vivencia. Significa que de alguna forma la energía Reiki está trabajando en la sanación de tales experiencias, que pudieron ser dolorosas o bien que dejaron secuelas o procesos no resueltos en el inconsciente. El renacer en forma terapéutica nos ayuda a sentirnos plenos y con derecho a estar presentes en la vida.
Recepción de imágenes mentales: Escenas de la vida, colores, luz, figuras. Esta es una de las sensaciones más atractivas de Reiki. El cerebro, al estar trabajando nuestras vivencias en combinación con la información de los cuerpos sutiles, produce un fenómeno de " imágenes en pantalla ". Estas pueden ser tan variadas como cada persona lo es, sin embargo se pueden catalogar en grandes temas: Manchas de colores sin forma, que se relacionan a la actividad curativa de la energía; Figuras correspondientes al plano astral, las cuales tienen significado conforme a la energía de la persona; Escenas del inconsciente, especialmente cuando se trabaja memoria celular; Imágenes de los registros akáshicos, etc.
Sueño profundo con movimiento ocular: Es sumamente frecuente que se presente este estado, acompañado de relajación total. Significa que el inconsciente está trabajando en nuestros sueños, sanando experiencias de vida que han quedado abiertas y sin procesar. Lo ideal en estos casos es dejar dormir a la persona durante el tiempo de la terapia. Posteriormente es conveniente despertarlo poco a poco, que tome conciencia de sí mismo, del tiempo y del espacio.
Entrada a sueño o estado de meditación profunda: A este sueño se le llama también estado hipnótico. Se caracteriza porque la persona se duerme, frecuentemente con la boca y los ojos abiertos, con rigidez corporal y además realiza una serie de movimientos corporales y faciales muy libres, semejantes a un ave en vuelo, bailes, automasaje, etc.… Ello se debe a sanaciones sumamente profundas del inconsciente, o de karmas. En algunas ocasiones han manifestado que en dicho estado, tuvieron desprendimientos de su propio cuerpo, llegando a experiencias tales como presenciar la terapia fuera de su cuerpo, o bien haber viajado en otros sitios o lugares distantes. ( Centro de la ciudad de Tokio, Japón – Campamentos gitanos en Europa Oriental) Cuando esto sucede es conveniente que el paciente hable de su experiencia y se dé el tiempo suficiente para volver al aquí y ahora, esperar a que tome cabal conciencia de sí mismo, antes de conducir automóvil o caminar por la ciudad, especialmente para evitar accidentes o que regresen momentos después al sitio de la terapia Reiki, sin saber a donde tienen que ir o qué hacer.
Necesidad profunda de estar consigo mismo y en soledad: Esta es una reacción muy frecuente dentro de la terapia Reiki, debido a que nos lleva a tomar una conciencia personal a la vez de confrontarnos en forma integral. Es conveniente darnos la oportunidad y el tiempo necesarios de contactar, sentir y vivir nuestra propia historia y los efectos de las circunstancias que nos rodean y afectan.
Sensación de presencia o dolor en órganos extirpados o miembros amputados: Es sumamente frecuente que esto acontezca. Lo ideal es dar Reiki aunque dicha parte del cuerpo no exista físicamente. De esa manera se sanan las heridas energéticas que causa la cirugía.
Reaparición de síntomas ligeros de enfermedades crónicas o del pasado: Como la terapia Reiki tiene la característica de sacar todo aquello que afecta al organismo para dejarlo libre de bloqueos o ataduras, algunas veces trabaja liberando efectos que han quedado desde tiempo atrás.