¡Maestro, MAESTRO!
quiero salir del laberinto de mi alma!
siento que comprendí todo lo estudiado!
Quiero irme, volver a caminar, ayudar, trabajar,
amar, vibrar, sentir, abrazar,
servir, actuar
disfrutando de lo aprendido junto a ti
durante todos estos años,
y dejar de pensar en todos estos textos sagrados y demás.
Como lo hago?
Ve, y regala todos tus libros a la gente de la calle.
Luego, actúa con los demás
y sirve según lo que sientas;
tú, ya eres EL Libro.
Pero maestro, y si tengo una duda,
como haré para buscar la respuesta si regalo todos mis libros?
En ese caso, quédate
En ese caso, quédate
si sientes que tendrás dudas,
querra decir que todavia no estas nada listo
Las respuestas están solo en TI!
Si de verdad te sientes capaz de abandonar tus barcas,
Abre la puerta y Fuera!,
tendrás incluso que olvidarme
y ser tu propio maestro,
contar contigo mismo,
confiar de verdad en ti
Allí fuera es donde te medirás,
vibraras, transmitirás y recibirás
Solo observando
Solo observando
veras muchas cosas allí fuera
todas las respuestas están ante tus ojos.
Es lo mejor que uno puede hacer para entrenarse a Ver:
observar atentamente
Pero recuérdate, no hables en demasia,
ni alardes de tus conocimientos,
no intentes ayudar si no te lo piden ;
se discreto y, ESCUCHA,
recuerda usar la llave maestra de la humildad
junto a las otras, las del Amor y del Presente;
sino, tus conocimientos nunca serán sabiduría...
Ahora, si lo sientes, ve y SÉ !