El Maestro dice: El abismo es la morada del Tao; |
Limpísima es su pureza. |
Sin Él ni los metales ni las piedras musicales tendrían su sonoridad. |
Aunque la tienen, no suenan si no son golpeadas. ¿Cuál de los dies mil seres puede fijarlo? |
El hombre de virtud regia procede con sencillez y se avergüenza de ser muy entendido en los negocios. Se ha fundado en su origen. |
Su inteligencia comunica con el Espíritu, de ahí le viene la grandeza de su virtud. Su corazón no actúa sino es requerido por las cosas. |
Porque el cuerpo no vive sin el Tao; y la vida no brilla si no es por la Virtud. |
Conservar el cuerpo, consumir la vida viviéndola entera, fundarse en la Virtud, entender el Tao, ¿no es acaso la Virtud regia? |
Es inmensa, surge misteriosamente, se mueve activa y arrastra tras sí a los diez mil seres. Tal es el varón de Virtud regia. Ve en la oscuridad, oye en el silencio (sin voz). |
Sólo él es capaz de ver claro en la oscuridad; sólo él puede oir la armonía callada y sin voz. |
Por ser profundo en su profundidad, tiene el dominio sobre las cosas. |
Por ser espíritu en su espiritualidad puede ser tan sutil en su esencia. |
Asi es como puede unirse a todas las cosas. |
Por su extrema vaciedad es capaz de satisfacer a todas las demandas. |
A todas horas acuden a él a pedir hospitalidad los seres todos, pequeños y grandes, largos y cortos, cercanos y lejanos. |
El emperador Huang Ti viajaba por el norte del río Chih (Rojo).´ Subió al monte Kun lun (Koulkun en el Tibet) y, después de contemplar las regiones del sur, tomó el camino de vuelta. |
Perdió su perla negra (la sabiduría). Ordenó a la inteligencia que la buscara, pero ésta no la pudo hallar. Ordenó a la agudeza de la vista; tampoco éste la pudo hallar. Encargó a la discusión que la buscara, pero éste no la pudo hallar. Ordenó la búsqueda a invisible; Hsiang Wang (invisible) la halló. |
Huang Ti exclamó: ¡Cosa rara! Hsiang Wang (invisible) la ha podido hallar. |
tomado del libro: Chuang-Tzu
Tang yin (1470-1523) |